Si te preocupa cómo afecta una operación de pecho después de la lactancia a tus senos, en este artículo, despejamos todas tus dudas. ¡Sigue leyendo para no perder detalle!
La maternidad es, sin duda, una de las experiencias más gratificantes que una mujer puede vivir. Le hace sentirse plena y dichosa. El problema es que durante el embarazo su cuerpo sufre una serie de cambios físicos como consecuencia de la alteración hormonal propia de ese estado, y el pecho es una de las partes que más los acusa.
Más aún si opta por la lactancia, tras la cual el pecho suele perder firmeza y consistencia y termina por caer. Sin embargo, afortunadamente existen tratamientos estéticos después del embarazo con los que todas las madres pueden recuperar la belleza de su pecho previo a la maternidad.
Si estás interesada en conocer qué tratamientos postparto son los más adecuados según tu caso, valorar qué posibilidad tienes de someterte a una operación de pecho después de la lactancia o, simplemente conocer más en profundidad todas las opciones, te los detallamos a continuación.
¿Qué son los tratamientos postparto para el pecho?
Se considera tratamiento postparto para el pecho cualquier tipo de intervención quirúrgica que tenga como finalidad mejorar el aspecto, la posición, el volumen y la forma del pecho caído o vaciado tras la lactancia o el embarazo.
El objetivo, por lo tanto, de este tipo de cirugía mamaria es tratar de rejuvenecer el busto recuperando su firmeza y devolviéndolo a su posición original.
Problemas estéticos del pecho después de la maternidad
En efecto, muchas mujeres después de pasar un embarazo y, sobre todo, si deciden amamantar a su bebé, se encuentran con que el aspecto de sus pechos ha cambiado. En unos casos se trata de un problema de pecho caído, en otros, de pecho vacío tras la lactancia. O incluso pueden darse ambos problemas a la vez al verse afectados los tejidos mamarios.
En general, los síntomas más habituales tras la maternidad relacionados con el pecho son:
- Pérdida de firmeza o flacidez.
- Atrofia o hipertrofia muscular.
- Caída mamaria o ptósis.
- Pérdida de volumen.
- Estrías.
Para todos ellos hay solución, en el campo de la cirugía plástica, con los diferentes tratamientos postparto para el pecho. Será el cirujano quien valore el método óptimo para conseguir reafirmar el pecho tras la lactancia o el embarazo. Y es que los efectos que provoca el embarazo son distintos en cada mujer. De ahí que sea necesario analizar caso por caso de manera individual o personalizada con el fin de ajustar el tipo de intervención.
Expectativas realistas sobre los resultados de una operación de pecho después de la lactancia
La operación de pecho después de la lactancia puede ayudarte a recuperar la confianza en tu cuerpo y mejorar tu autoestima, pero es fundamental tener expectativas realistas sobre los resultados. Esta cirugía no es una solución mágica para todos los problemas estéticos del pecho, y los resultados pueden variar según cada persona.
Es importante entender que la cirugía puede mejorar la forma, el tamaño y la posición de los senos, pero no puede eliminar por completo las estrías ni garantizar una simetría perfecta. Habla abiertamente con tu cirujano plástico sobre tus expectativas y asegúrate de comprender los posibles resultados y limitaciones de la operación de pecho después de la lactancia antes de tomar una decisión.
¿Cuándo es recomendable realizar cirugía postparto para el pecho?
Hay que tener en cuenta que el cuerpo necesita un tiempo para recuperarse del parto. Precisamente por ese motivo, lo más prudente es esperar, como mínimo, unos seis meses desde el parto o el final de la lactancia antes de someterse a cualquier intervención estética.
Aún así, en caso de duda, siempre tienes la opción de acudir a un cirujano experto en este tipo de operaciones, que te dirá, tras examinarte, si tu cuerpo ya está preparado realmente para someterse a una operación mamaria. Eso sí, evita llevarla a cabo durante el periodo de lactancia. ¡Totalmente contraindicado!
Factores de riesgo en la operación de pecho después de la lactancia
La operación de pecho después de la lactancia es una opción para muchas mujeres que desean recuperar la forma y firmeza de sus senos tras la maternidad. Sin embargo, es crucial conocer los factores de riesgo asociados a este tipo de cirugía. Algunos de los factores que pueden influir en el éxito de la intervención y la recuperación son la edad, el estado de salud general, el tabaquismo, la obesidad, la presencia de enfermedades crónicas y el tiempo transcurrido desde el fin de la lactancia.
Es fundamental consultar con un cirujano plástico cualificado para evaluar estos factores de riesgo de forma individualizada y determinar si eres una candidata adecuada para la operación de pecho después de la lactancia.
Operación de pecho después de la lactancia: principales tratamientos estéticos
Existen diferentes opciones de cirugía estética para mejorar tu pecho según el problema en concreto que presente y lo que se quiera corregir. En ocasiones, el facultativo puede recomendarte una combinación de técnicas para recuperar por completo el buen aspecto de tu pecho.
En general, el avance de la cirugía estética está haciendo posible que estos tratamientos quirúrgicos sean muy poco invasivos. De esa forma, las molestias tras la operación son mínimas, mientras que la recuperación en cambio se agiliza, permitiendo volver a tu puesto de trabajo o a tus quehaceres habituales en muy poco tiempo.
A continuación explicamos en qué consiste cada uno de los principales tratamientos postparto que existen para recuperar la belleza del pecho tras la lactancia.
Mastopexia
La mastopexia es un procedimiento quirúrgico que persigue rejuvenecer el pecho, recolocándolo y levantándolo, después de haber sufrido una pérdida de firmeza tras la maternidad. Si el pecho, además de caído ha perdido tamaño, es necesario completar la intervención con la colocación de prótesis mamarias para conseguir un escote de impacto.
La técnica que seguimos en la Clínica Doctor Millán Mateo consiste en elevar el pezón-areola y redondear la mama, para que se fije a la pared torácica en una posición más elevada. Se realiza fundamentalmente a expensas de resección cutánea, y produce una cicatriz vertical lineal y fina, que pasa desapercibida entre tres y seis meses desde la intervención.
Se trata de un tratamiento ambulatorio que se realiza con sedación y anestesia local, y las incisiones que se realizan son periareolares, con cicatriz vertical en J o L. En cuanto a los resultados de la mastopexia, son inmediatos, aunque se aprecian mejor a partir de los seis meses de la cirugía. El pecho queda más erguido y con un aspecto más juvenil. Además, las cicatrices son inapreciables.
Además, la mastopexia mantiene la sensibilidad y la capacidad de la lactancia, sin dañar la calidad de la leche materna en la mayor parte de los casos. Es uno de los tratamientos postparto que se aconsejan cuando la mujer no ha perdido volumen en sus mamas y quiere tener un aspecto más proporcionado sin tener que recurrir a los implantes.
Reducción de pecho
Cuando se producen hipertrofias causadas por los cambios hormonales del embarazo, se suele aplicar como solución la reducción de pecho. Como su nombre señala, consiste en una cirugía de reducción del tamaño mamario. En gran parte de los casos se acompaña de un problema de caída de las mamas, por lo que es necesario realizar una mastopexia de reducción. Solo de forma ocasional se combina con la liposucción para conseguir un pecho más armónico.
El problema de tener un agrandamiento excesivo de mamas no solo afecta a la imagen personal, sino que también puede ocasionar secuelas físicas como dolor de espalda o dificultades de movilidad.
El tratamiento es ambulatorio y se realiza con sedación y anestesia local, pero también puede hacerse con anestesia general según cada paciente. Para hipertrofias leves suele emplearse la técnica de la cicatriz vertical, y para los casos más graves es más adecuada la técnica de la cicatriz en ancla o T invertida.
Desde el primer momento ya se aprecian los resultados, sin embargo es mejor esperar entre seis meses y un año. Comprobarás que mejora la estética del pecho, se reduce su tamaño y desaparecen los problemas físicos derivados, consiguiendo un pecho más acorde a tu cuerpo.
Aumento de pecho
La operación de aumento de pecho tras el embarazo es la técnica quirúrgica con la que, mediante la colocación de unos implantes de silicona, puedes incrementar el tamaño de tus senos, rellenar pechos vaciados tras la lactancia o corregir pechos asimétricos, entre otros problemas. Todos ellos como consecuencia de los cambios hormonales que se dan durante el embarazo.
Se trata de realizar una pequeña incisión en la parte inferior de la areola, y después introducir un implante por debajo del músculo o detrás de la glándula mamaria. La intervención dura alrededor de una hora y se realiza con anestesia general.
En la Clínica del Doctor Millán Mateo se realiza la técnica “descenso asimétrico del surco submamario”, creada por él mismo, y que consiste en colocar las prótesis de silicona en el plano submuscular, favoreciendo así la movilidad posterior del pecho. Además, se trabaja con el máximo cuidado el surco mamario, descendiendo para evitar que la mama quede alta y poco estética.
Además, contamos con implantes mamarios de las mejores marcas internacionales y con sellado CEE. Sea cual sea la técnica utilizada, los resultados definitivos se aprecian a los seis meses, viendo un pecho más bonito, de forma redondeada y con aspecto natural.
Aumento de pecho con grasa propia
El aumento de mama con grasa propia es la mejor solución, dentro de los tratamientos postparto, si buscas aumentar el tamaño de tu pecho sin tener que recurrir a las prótesis de silicona. Eso sí, requiere que tengas suficiente grasa en otras zonas de tu cuerpo, para extraerla y emplearla como relleno para conseguir el tamaño y volumen de pecho deseado.
Someterse a esta cirugía consiste, en primer lugar, en realizar una liposucción en aquellas partes del cuerpo que contienen más grasa. A continuación, la grasa extraída pasa a ser procesada y tratada, para después rellenar con ella las mamas.
Por último, se inyecta en los pechos, logrando así un aumento moderado del busto.
Los beneficios del uso de esta técnica son:
- Al ser realizada con tu propia grasa, evitas problemas de incompatibilidad o rechazo.
- El periodo de recuperación es más corto que si se utilizan prótesis de silicona para el aumento.
En cuanto a la intervención, esta se puede realizar con sedación y anestésico local, en hospital de día o como mucho solo un día de hospitalización, y su duración es entre una hora y dos horas y media.
Sus resultados son inmediatos, pero los definitivos, con un aumento moderado del tamaño de los senos, se aprecian mejor entre tres y seis meses después de la operación. La recuperación es rápida, ya que a la paciente se le da el alta el mismo día o, a más tardar, a las 24 horas de la intervención.
Resultados de los tratamientos estéticos después del embarazo
Sin duda, con los tratamientos postparto conseguirás recuperar el aspecto juvenil de tu pecho de forma inmediata tras la maternidad, y volverás a sentirte realizada como mujer. Así, además de mejorar la forma, el volumen, la posición y el aspecto que tu pecho tenía previamente al bebé, volverás a sentirte a gusto en tu propia piel. Nada mejor que eso para recuperar la autoconfianza.
Para ello, no tienes más que acudir a la Clínica Doctor Millán Mateo. Su gran experiencia en cirugía de mamas y sus técnicas de vanguardia son un aval para conseguir los resultados que buscas. Déjate asesorar por la mejor clínica de cirugía estética de Madrid y descubrirás todo lo que estos tratamientos postparto pueden hacer por ti.
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Y ahora… ¡lista para disfrutar de tu maternidad sin complejos!😀