Corrige los párpados caídos y esas molestas bolsas en los ojos que le dan a tu rostro un efecto de cansancio y vejez con una blefaroplastia.
La caída de los párpados y la formación de bolsas debajo de los ojos se producen de forma natural tanto en hombres como en mujeres con el paso de los años. Si bien en cada persona la intensidad de estos signos de envejecimiento es distinta, la mayoría presenta una sintomatología común, como es la pérdida de elasticidad de la piel de alrededor de los ojos o la debilitación de los músculos faciales. Además, algo habitual en personas de edad avanzada es la acumulación de tejidos grasos en la zona de alrededor de los ojos, lo que proporciona al rostro un aspecto avejentado y de cansancio.
Frente a todo ello, la blefaroplastia se postula como la intervención quirúrgica de tipo estético que trata de corregir todos estos problemas de forma permanente. Su finalidad no solo es mejorar la estética de la mirada, sino también corregir la visión en los casos en que aparece un descolgamiento de la piel significativo. Vamos a contarte seguidamente cómo se realiza la corrección de los párpados caídos y de las molestas bolsas en los ojos a través de la blefaroplastia. También describiremos todos los pasos del proceso de recuperación de dicha operación plástica, así como los requisitos que debes cumplir si deseas someterte a una blefaroplastia en Madrid. ¡Pon atención!
Tabla de contenidos
¿Qué es la Blefaroplastia?
La cirugía de párpados denominada blefaroplastia consiste en la extracción de la grasa y del exceso de piel que se forma alrededor de los ojos, tanto en los párpados inferiores como en los superiores, fruto del proceso natural de envejecimiento. Este tipo de cirugía busca reparar, en concreto, los párpados caídos, las bolsas palpebrales, las ojeras e incluso la visión, que en numerosas ocasiones se ve también afectada por la exagerada caída de piel en los párpados.
Tipos de blefaroplastia
Existen, a priori, tres tipos de blefaroplastia, coincidiendo con las diferentes técnicas que se utilizan de manera habitual para realizar la cirugía de párpados. El problema a tratar es el que va a determinar la forma y el método que escoja el cirujano.
Blefaroplastia superior
La blefaroplastia superior es aquella intervención en la que el objetivo es reparar los párpados caídos, extirpando parte de la piel descolgada, con el fin de rejuvenecer la mirada y mejorar la visión en caso de que ésta se viera comprometida.
Blefaroplastia inferior
Con la blefaroplastia inferior, lo que se busca es eliminar las bolsas de grasa que se forman debajo de los ojos para mejorar la estética general del rostro. Tras la intervención, el paciente parece haberse quitado años de encima, y, sobre todo, cansancio.
Blefaroplastia completa
A la combinación de las dos técnicas anteriores se la conoce como blefaroplastia completa. Esta operación consiste en la reparación de los párpados superiores e inferiores en una misma intervención. La finalidad que se persigue es la misma que en ambos casos.
¿En qué consiste la cirugía de párpados caídos?
Se conoce como ptosis palpebral a la caída del párpado superior. Normalmente, este problema estético se produce como consecuencia de una disfunción del músculo elevador del párpado debida a causas degenerativas o bien congénitas. Para estos casos, la blefaroplastia de párpados caídos se realiza mediante un procedimiento ambulatorio con anestesia local.
Durante la intervención, el cirujano estético practica una incisión, que puede ser en el surco natural de los párpados superiores o bien dentro de la línea de las pestañas, en el caso de los párpados inferiores. Todo con el objetivo de tensar el músculo para retirar el exceso de grasa y extirpar el exceso de piel que forma las bolsas. Finalmente, se suturan los cortes con un hilo muy fino.
Igualmente, la blefaroplastia puede realizarse mediante una incisión dentro del propio párpado cuando no hay presencia de bolsas en los párpados inferiores. De esa forma se evitan las cicatrices alrededor de los ojos.
Postoperatorio de una blefaroplastia
A pesar de ser una cirugía sencilla, además de prácticamente indolora, el paciente debe seguir unos cuidados esenciales después de la operación para que todo vaya bien y la recuperación de la blefaroplastia sea más rápida. No hay que olvidar que, como en toda intervención, en las siguientes 24 a 48 horas pueden sentirse molestias, sobre todo a medida que pasa el efecto de la anestesia. También puede presentarse hinchazón y algunos moratones alrededor de los ojos, pero no suelen manifestarse molestias significativas, y el dolor es fácilmente tratable con medicamentos. En caso de lagrimeo se puede utilizar colirio antibiótico durante algunos días.
En cuanto a las cicatrices, el proceso de recuperación es progresivo. En un principio y durante los primeros meses se verán rosadas, y más adelante irán desapareciendo hasta quedar prácticamente invisibles o al menos bien disimuladas.
A continuación resumimos las principales recomendaciones que debes tener en cuenta para después de la cirugía:
- No fumar durante el primer mes.
- Descartar el uso de lentes de contacto los primeros días después de la intervención.
- Utilizar gafas de sol para proteger los ojos del viento y la luz.
- Evitar el deporte y cualquier tipo de esfuerzo físico.
- No consumir alcohol durante la primera semana.
- Es posible volver al trabajo y la rutina diaria una semana después de la cirugía de párpados.
- Usar lágrimas artificiales para calmar el ardor y la sequedad en los ojos.
- No conviene exponerse directamente a fuentes de calor, como saunas, baños de vapor, etcétera.
¿Quién puede realizarse la blefaroplastia?
Cualquier persona que sienta malestar o desagrado ante la aparición en su rostro de bolsas alrededor de los ojos o párpados caídos, hombres y mujeres, por igual, son susceptibles de someterse a una blefaroplastia correctiva de párpados. Por lo general son gente mayor de 35 años la que suele demandar un retoque en sus párpados para quitarse años y cara de cansancio de encima.
Y es que la edad es la principal razón a la que achacar la caída de párpados y la acumulación de exceso de piel alrededor de los ojos. Sin embargo, no es la única. Hay otras razones que aconsejan pasar por el quirófano (siempre que ocasionen complejo):
- Pérdida de la elasticidad de la piel.
- Debilitamiento o alteración de los músculos del párpado.
- Reacciones alérgicas.
- Traumatismos en la zona de los ojos.
- Enfermedades neurológicas.
- Afecciones congénitas.
- Enfermedades musculares.
- Aneurismas o tumores en el interior del cráneo.
Por su parte, las bolsas de grasa debajo de los ojos aparecen principalmente por el paso del tiempo, y generalmente se hacen notar después de los 30 años. Pero también pueden producirse por herencia genética en personas más jóvenes. En este caso, las bolsas pueden volver a aparecer después de la blefaroplastia.
Si te preocupan las bolsas de tus ojos, o bien quieres devolverle a tu rostro una mirada joven y descansada, la cirugía de párpados ofrece excelentes resultados a largo plazo. En Madrid cuentas con el Instituto de Cirugía Estética Dr. Millán Mateo, donde te informaremos sin ningún compromiso sobre el precio de la blefaroplastia o cómo conseguir un rostro rejuvenecido de manera permanente gracias a esta intervención médica estética.
Existen, asimismo, alternativas para el tratamiento de los ojos, como la blefaroplastia sin cirugía, que es una manera menos invasiva de recuperar la mirada de infarto que tenías años atrás. Recuerda que en la clínica del Doctor Millán trabajamos con tratamientos de vanguardia que destacan por su alta calidad y rigor médico, siempre con el aval de la Clínica Ruber. Ponte ya en contacto con nosotros, ¡no tienes nada que perder y sí mucho que ganar!